La radio
brinda el privilegio de la amistad incondicional, la radio
funda, engendra y pare, la radio multiplica. Hace solo días
conocí su templo, le llaman “Jumanji”. Desde entonces, soy un
mejor ser humano.
Prólogo
Todo
comenzó para el mes de mayo de 2013, cuando a través de Juan
Carlos/CO2JD, recibí la magnífica noticia, que me pareció broma;
de que ambos estábamos invitados por Jorge Prieto/HK1R, a participar en
la operación
que para el CQWW de CW, preparaban desde su estación de
concurso: HK1NA.
Luego, otros correos electrónicos
intercambiados con Pepín/HK3TK/CO2TK confirmaron la buena nueva.
A partir de ese momento fueron incontables los e-mail cursados
en una y otra dirección, varios los viajes a La Habana desde Las
Tunas y otros tantos los inconvenientes burocráticos y pedidos
consulares, a los que afortunadamente Jorge accedió de manera
oportuna.
Finalmente,
un día antes del vuelo, pude tener la visa en mis manos; ya Juan
Carlos, por residir en La Habana, la había recibido con
anterioridad. Volamos hacia Cartagena con conexión en Ciudad
Panamá el día 19 de noviembre en la mañana, al mediodía,
arribamos a la bella ciudad caribeña. En las afueras del
aeropuerto, como habíamos acordado, nos esperaba Pedro/HK1X.
Cartagena de
Indias
Pedro
resultó ser tal como lo imaginaba luego de tantos años de
contactos radiales: alguien con un
excelente
carácter y sobre todo, muy buen anfitrión. Luego de dejarnos
instalados en un pequeño pero muy confortable hotel, prometió
recogernos en la noche para cenar juntos y mostrarnos la parte
antigua de la ciudad.
Mientras, decidimos salir a dar un
recorrido por los alrededores para al mismo tiempo, almorzar
algo.
Cartagena de Indias es sin dudas una bella ciudad y sus
habitantes le hacen honor con una humildad
y educación asombrosas, luego comprobamos que la amabilidad y el
buen carácter es propio del colombiano, al menos de los
“costeños” como se autodenominan los habitantes del litoral
norte del país. Al regresar al hotel por fin tuve tiempo
suficiente para actualizar a la familia y a las amistades a
través del
correo
electrónico.
Con ese objetivo llevé desde Cuba un Ipod y a pesar
de algunos tropiezos iniciales por desconocimiento, no faltó
donde quiera que estuve, una red de WiFi para conectarme a
Internet.
En la noche, fuimos con Pedro a recorrer parte de la
ciudad antigua; la que por momentos nos recordó el casco
histórico de La Habana, con las calles adoquinadas y la
arquitectura propia de una metrópolis y época fundacional en
común.
Cenamos en un magnífico restaurante con nombre “Crepes & Waffles”, un sitio con un ambiente muy agradable, donde se
mezclan armoniosamente lo antiguo y lo moderno.
Jumanji
historia
Sobre las
nueve y media de la mañana del miércoles, Pedro nos encaminó
hasta la estación de “busetas”, como llaman allí al transporte
que cubre el recorrido entre las principales ciudades
“caribeñas”.
Tomamos la
ruta Cartagena – Barranquilla con la indicación de
quedarnos
en una gasolinera cercana a la finca donde Jorge tiene instalada
su estación; allí nos esperarían dos motocicletas para
trasladarnos hasta “Jumanji”.
Luego de aproximadamente hora y
media de viaje llegamos al sitio indicado, donde efectivamente,
dos “moto taxis” aguardaban por nosotros. Luego nos percatarnos
que la presencia de
este tipo de transporte es muy común por aquellos lares, casi
“epidémica”; según cuentan, luego de la instalación en la zona
de una fábrica de origen chino.
A medida que nos acercábamos a
la estación y el campo de antenas se hacía cada vez más visible,
comencé a percatarme de la grandeza real de aquella instalación;
cuando Salim/HK1T nos dio la bienvenida y nos invitó a conocer
el shack me convencí aún más de lo privilegiados que éramos, una
estación con siete confortables posiciones en las que predominan
radios ICOM 7600, 7700 y 7800 con amplificadores Alpha 8410, sin
dudas, son razones suficientes.
Salim es uno de los líderes de
la “cofradía”, una persona increíblemente atenta y “otra vez”,
alguien con muy buen carácter; siempre activo, cuando llegamos
al mediodía, trataba de poner a punto el rotor de la cubical
quad para la estación multiplicadora.
La legión
extranjera
Jorge ya
nos había dado una amable bienvenida por teléfono a nuestra
llegada y constantemente estuvo al
tanto
nuestro a través de Pedrito durante nuestra estancia en
Cartagena.
Luego de instalarnos en la finca, supimos que esperaba en
Barranquilla por el resto de los colegas que arribarían desde
EEUU y Brasil.
Sobre las tres de la tarde llegó a la finca
acompañado por Lars/K9FY, Ville/PY2ZEA/OH2MM y
Thomas/PY2ZXU/SM0CXU, quienes junto a Mariano/LU8EOT, Juan
Carlos/CO2JD y yo, completábamos el grupo de operadores
extranjeros.
A Mariano lo conocí personalmente algo más tarde,
cuando regresó de casa de Bolmar/HK1MW, donde se encontraba
junto a Jaime/HK1N instalando los SDRs para el skimmer.
Todos de
primera instancia me parecieron gente increíble, muy accesibles
y sencillas a pesar de poseer respetables historiales
relacionados con grandes expediciones y concursos desde
diferentes partes del mundo.
Lars y Thomas son de origen sueco,
mientras que Ville es finlandés, miembro del conocido club
“Radio Arcalá”.
Barranquilla
Ese
día Jorge nos invitó a conocer Barranquilla, y al mismo tiempo,
lo acompañamos a hacer parte de las compras necesarias para los
próximos días en la finca.
Como para no ser la excepción, porque
además, tratándose del líder no podía ser de otra manera;
resultó ser alguien muy cercano, como si nos hubiésemos conocido
desde siempre. De todo un poco se habló durante el trayecto
hasta la ciudad, distante algunos minutos de la finca.
Nos llamó
la atención la calidad de la autopista y como se construye,
superponiendo materiales de diferentes características entre los
que se tiende una especie de capa de polietileno; según nos
explicó Jorge, es por las características del terreno, proclive
a desmoronarse entre etapas de lluvia y sequía.
También es
imponente la alta actividad constructiva que se aprecia por
doquier.
La parte de la ciudad que conocimos me recordó algunos
repartos de La Habana, como las partes más modernas de “El
Vedado”. Luego de las compras, pasamos por Frank/HJ1FAR, otro de
los integrantes del team, que se encarga de las cuestiones
informáticas; también, una gente “de puntería” como decimos por
acá. De ahí, regresamos directamente a Jumanji.
Jueves.
Para el
jueves en la mañana ya todo el equipo estuvo completo, con
excepción de Pedro que llegaría al siguiente día por
obligaciones laborales y Pepín/HK3TK, quien había perdido
el
vuelo desde Bogotá.
Bien temprano conocimos al resto del team:
Bolmar/HK1MW y Jaime/HK1N, quienes son algo así como los
patriarcas del grupo, no solo por su edad; sino por el respeto
que inspiran y merecen.
En la mañana, la finca parecía
un
hervidero, todos hacíamos algo de lo que quedaba pendiente a
pesar de las muchas semanas de trabajo intenso.
Mientras,
la “parte cubana” ayudaba a Salim en la construcción de los transformadores hechos con tramos
de coaxial de 75 ohmios para la cúbica, y Jaime chequeaba con el
analizador de antenas si adaptaban correctamente los 100 ohmios
de impedancia.
Luego del almuerzo, Bolmar nos invitó a hacer un
recorrido por el campo de antenas. De manera especial, nos llevó
hasta una de las dos antenas de cinco elementos verticales para
80 metros en las que personalmente había trabajado
recientemente.
Allí, admirando aquella magnífica obra y
escuchándolo hablar tan apasionadamente, sumé una razón más para
sentirme privilegiado; me sentí protagonista de una iniciación,
frente a aquel “monstruo radiante” y Bolmar como maestro de
ceremonias.
Al regreso, me senté por un rato en la estación de
10 metros, en “un abrir y cerrar de ojos” trabajé más de un
centenar de estaciones, de esta manera, se escuchó por vez
primera HK1/CO8ZZ.
A media tarde Bolmar nos invitó a conocer
“Juan de Acosta” el pueblo donde vive. Luego de dejar a Mariano
y Jaime en su casa, proseguimos viaje hasta el poblado.
Juan de Acosta
El pueblo
ciertamente no deslumbra por su belleza, sin embargo, posee la
magia propia de lo sencillo.
Con la
estructura característica de todo pequeño pueblo: la parroquia,
un parque y alrededor todo lo demás, me recordó por
alguna razón escondida en el subconsciente, la literatura de
ese ilustre “costeño”: Gabriel García Márquez.
Una colorida
escultura del libertador Simón Bolívar situada frente a un
céntrico edificio, el que sospeché fuera la alcaldía, sirve de
humilde homenaje de recordación a ese gran hombre tan ligado a
la historia de esa tierra y de la América toda.
Luego de un
breve recorrido en el que por cierto, Bolmar demostró ser
alguien muy querido por sus correligionarios, regresamos a su
casa. Allí, Mariano y Jaime continuaban trabajando en los SDRs
para el skimmer, los que por alguna razón, no funcionaban como
se esperaba apenas a 24 horas de comenzar el concurso.
En un
momento determinado, se sospechó fueran las antenas receptoras
las causantes del mal y decidimos entre Bolmar, Juan Carlos y
yo, subirlas todo lo que permitieran el largo de los coaxiales,
en definitiva, todo resultó ser un problema de software que
quedó resuelto justo al caer la noche.
Regresamos
a Jumanji ya entrada la noche, luego de comer me senté
en
la estación de 40 metros, que junto a Pedro, era a la que estaba
destinado por el plan de operación.
Según este, los turnos
serían de cuatro horas de operación y al menos durante las
primeras horas del concurso, estaríamos solo en esta banda, para
luego, al menos yo, pasar a los 10 metros.
Sin embargo, por la
ausencia de algunos de los colegas en la rotación original, el
plan sufrió variaciones. Esa noche tuve el placer de operar la
magnífica estación que posee HK1NA en esa banda: un ICOM IC-
7800 excitando un ALPHA 8410 y un “rosario” de antenas entre las
que sobre todo, utilicé
el stack de dos yagis de tres elementos.
También
cuenta la estación con cinco elementos verticales hacia Europa y
otras antenas de alambre más una receptora SAL-20.
Acostumbrado al alto nivel de ruido que normalmente padezco en
casa, aquello me pareció el paraíso y gocé de constantes y
nutridos pileups durante todo el tiempo que estuve en el aire.
Una de las varias estaciones cubanas que contacté fue
Douglas/CO8DM, quien llamó a casa y avisó a mi esposa con quien
pude hablar un rato después.
Experimentar esa rara sensación de escuchar gente querida cuando
se está lejos del hogar es algo indescriptible, por cierto, mi
veterano TS-130s se escuchaba estupendamente bien con sus
maltrechos 10 watts. Al cerrar la estación, había contabilizado
más de 650 contactos.
Viernes
En la
mañana se completó el equipo con la llegada de Pedro y Pepín,
este último, un cubano que vive en
Colombia
desde hace ya algunos años.
Curiosamente, luego de tanto tiempo
de hablar por radio estando en Cuba, nos conocimos personalmente
a casi dos mil kilómetros de la patria.
En Cuba, Pepín ostenta
el indicativo CO2TK y mientras andaba por acá de manera
permanente, era una de las estaciones cubanas más activas en DX
y en concursos internacionales, alguien
muy simpático, sin dudas.
Durante una parte de la mañana probé
nuevamente la estación para 10 metros: un K3 con un ALPHA 8410 y
antenas para escoger: un stack de tres yagis de cinco elementos,
otro de dos yagis de nueve “super Berthas” y una ground plane.
Al igual que en 40 metros, disfruté nutridos pile ups con la
ventaja de la ausencia del QRN. Casi al mediodía subí a la loma
donde están emplazadas la mayoría de las torres; Salim y dos
torreros ayudados por Frank, Pepín y Juan Carlos daban los
últimos “acordes” para el izaje de la cúbica para la estación
multiplicadora. Llegué a tiempo para sumarme a la cuidadosa
labor de impedir que la “tela de araña” se enredara en los
vientos de la torre mientras se subía aquel monstruo.
Finalmente,
unos minutos pasadas las cinco de la tarde se dio por terminado
el montaje y bajamos hacia la estación para una reunión previa y
las fotografías del equipo antes de comenzar el concurso.
La hora “cero”
Desde unos
minutos antes de la hora de arrancada cada uno de los operadores
destinados para el primer
turno
ocupó frecuencias limpias. Bolmar/HKMW en 160 metros, Jaime/HK1N
en 80, Pedro/HK1X en 40, Ville/PY2ZEA en 20, Jorge/HK1R en 15 y
Mariano/LU8EOT en 10 metros; a las 00:00 UTC del sábado 23 de
noviembre, se comenzó a trasmitir la poderosa señal de HK1NA en
todas las bandas desde 10 hasta 160 metros.
Transcurrida una
hora de operación ya se tenían 591 contactos y se mantenía un rating de 672 QSOs por hora. Pensé acostarme y despertarme justo
antes de las once de la noche para relevar a Pedrito, pero no me
pude dormir y opté por esperar conversando o revisando el
desarrollo del concurso a través de una pantalla instalada fuera
del shack.
Las próximas horas fueron
de intensa actividad, cuando le entregué nuevamente a Pedro, ya
estaba redondeada la cifra de 1200 contactos.
Apenas unos
minutos después de terminar mi turno en 40 metros, relevé a Bolmar en la top band pues no se sentía bien y la verdad es que
yo no tenía mucho sueño.
Trabajar los 160 metros en HK1NA fue
una magnífica experiencia por las estupendas condiciones
existentes allí para esta banda: un IC-7600, un amplificador
ALPHA 9500 y además de dipolos, una vertical y una antena
receptora HI-Z. Utilizar esta antena fue una nueva
experiencia para mi, tras cada llamado hay que “direccionarla”
constantemente con un selector, en busca del posible
corresponsal.
Sobre las seis de la mañana regresé a los 40
metros y allí estuve hasta el cierre de la estación al filo de
las ocho, cuando fui a dormir por primera vez.
Sábado
El
día lo pasé haciendo relevos cortos en 10 y 15 metros, aunque en
la tarde
estuve cerca de tres
horas operando 15, luego de que al
pararme al lado de Lars, este me propusiera sentarme, a lo que
accedí inmediatamente.
Ya para ese entonces andábamos por los
8000 contactos con un rating de 468 QSOs por hora.
En 15 metros,
cuenta Jumanji con un ICOM IC 7700, un ALPHA 8410 y un stack de
tres yagis de seis elementos más una ground plane. A las siete
de la noche ocupé mi turno “oficial” en 40 metros hasta las
once, cuando me relevó Pedro.
Ya el día anterior me había
alertado que estuviera listo por si tenía que sustituirlo antes
de tiempo, pues no se sentía bien de salud, así que unos minutos
antes de las doce de la noche volví a sentarme al radio. Pedrito
regresó sobre las dos y media de la mañana, sintiéndose mejor.
Cuando me fui a descansar las estadísticas marcaban 11.600
contactos y un rating de 280 QSOs por hora, algo normal para ese
horario de la madrugada.
Domingo
Desperté
sobre las siete de la mañana e inmediatamente me fui a los
cuarenta,
un poco más tarde, al cerrar la estación andábamos ya
por los 12.800 contactos.
El resto del día lo pasé entre los
quince, los 10 metros
y la estación multiplicadora: Un IC-756 PROIII excitando un
amplificador ICOM PW-1 y una cúbica multibanda de cuatro
elementos.
Si algo disfruté durante el concurso, además de los
magníficos pileups, fue la “maniobrabilidad” que ofrece el CW
Skimmer en el trabajo de los multiplicadores, tanto en las
estaciones “running” como en la multiplicadora.
El
CW Skimmer es un software decodificador de morse diseñado por
VE3NEA, que en comunión con los SDRs te “marca” las estaciones
escuchadas en una especie de mapa de la banda.
A su vez, el
Wintest, que es el programa que se usa en HK1NA para “loguear”,
se encarga de avisar cuál de ellas es
multiplicador.
Un doble clic encima de la estación necesitada te
llevará inmediatamente a su frecuencia para trabajarla y
regresar lo suficientemente rápido como para no perder tu
frecuencia de llamada. Sin dudas, algo fantástico.
Las últimas
cuatro o cinco horas del concurso las pasé en 10 metros,
contrario a lo que pensé, la propagación no estuvo como el
sábado; lo mismo sucedió en 15 metros, dos bandas que
generalmente aportan
mucho
hasta el final del concurso.
Esto, sin dudas, contribuyó a un
resultado final por debajo de lo esperado. En definitiva, no se
logró el objetivo inicial que era superar lo realizado en el
2012, se terminó con una puntuación a reclamar de 42.822.198
puntos, producto a 15.156 contactos válidos, 203 zonas y 756
entidades trabajadas.
Esa misma noche, todos regresaron a sus
casas: Pedro regresó a Cartagena, mientras que con Jorge se
fueron a Barranquilla Pepín, Thomas y Ville, quienes volaban el
lunes temprano en la mañana.
En Jumanji solo quedamos Mariano,
Frank, Lars, Juan Carlos y yo, que iríamos a Barranquilla al día
siguiente.
De cualquier manera, a mi no me molestaba en lo
absoluto quedar una noche más allí, parte del tiempo lo dediqué
a actualizar con fotos recientes mi perfil de Facebook,
contestar algunos mensajes y a llamar en 40 metros, por primera
vez en SSB. A pesar del cansancio, debía aprovechar las
veleidades que me ofrecía HK1NA.
Lunes
Al otro día
en la mañana, Bolmar llamó para invitarnos a otro recorrido
antes de la despedida.
Más tarde
vino acompañado de Freddy/HK1ANP, su concuño y vecino, a quien
ya había conocido
anteriormente.
Baranoa,
resultó ser muy parecido a Juan de Acosta con algo más de
movimiento comercial.
Allí, nos sucedió algo curioso cuando al
visitar un centro comercial, el “manager” se nos acercó muy
respetuosamente al verme con la cámara fotográfica y Juan Carlos
como “modelo”, para explicarme que era política de la compañía
no permitir fotografías en sus establecimientos.
Cuando
Bolmar le explico que éramos visitantes cubanos y que él y
Freddy eran clientes del lugar (le mostraron una tarjeta), poco
faltó para que nos diera un tour por el lugar.
Conversamos
por un buen rato sobre las características y proyectos futuros
de la compañía dueña del establecimiento de una manera muy
cordial, algo que ayudó a reforzar la buena opinión que sobre
los colombianos ya tenía.
La amabilidad y la buena educación, es
algo innato en ellos y en
quienes se dedican al comercio es
mucho más notable, algo a lo que lamentablemente no estamos
acostumbrados acá.
Al regreso, dejamos a Freddy en su casa y
aprovechamos para conocer su magnífica estación de radio e
intercambiar tarjetas.
Llegamos
pasadas las tres y media de la tarde, ya Jorge nos esperaba.
Sobre las cinco de la tarde tomamos camino a Barranquilla.
Atrás
quedó Jumanji en una especie de mágico estado de sopor, porque
si de algo estoy seguro, es que entre concurso y concurso, HK1NA
nunca duerme.
Cerrando jornada
En la
noche, Jorge nos recogió en el hotel. Fuimos a cenar en un
agradable restaurante relativamente
cercano,
al que llegamos luego de hacer un recorrido por la ciudad.
Cuando Mariano y Salim se incorporaron al grupo, ya habían
pasado por la mesa varios temas de conversación y otras tantas
cervezas.
Esa noche vivencié una vez más cuan especial es la
radio. ¿De qué otra manera podrían coincidir en un espacio tan
pequeño como una mesa y en un ambiente tan fraterno, tantas
nacionalidades y tan diferentes idiosincrasias: dos colombianos,
un sueco-norteamericano, un argentino y dos cubanos?
Sobre las
once de la noche regresamos al hotel luego de despedimos de Salim y Mariano, quien se quedaría unos días más en Colombia.
Juan Carlos y yo volábamos a la una de la tarde desde Cartagena,
por lo que Jorge quedó en recogernos a las ocho y media para
tomar la buseta de regreso a las nueve de la mañana.
Antes de ir
a dormir nos despedimos de Lars, a quien un taxi lo recogería a
las cinco para ir al aeropuerto y por tanto debía madrugar. Un
abrazo a Lars nos acercó un poco más al final de estos
inolvidables días.
Martes (La
despedida)
Si hay algo
que nunca me han agradado son las despedidas, sobre todo cuando
se dejan atrás buenos momentos y mejores amigos.
Justo a las
nueve de la mañana del martes salimos rumbo a Cartagena.
Cuando
nos despedimos de Jorge, quedó atrás uno de esos grandes amigos
recién cosechados, pero sin dudas también, el mayor responsable
de todos los buenos momentos allí vividos.
En el aeropuerto de
Cartagena fue el último lugar donde tuve la posibilidad de
actualizar a la familia y a los amigos, respondiendo algunos
mensajes.
Casualmente, mientras esperábamos el vuelo,
coincidimos con un compatriota que vive en EEUU desde hace ya
varios años y que visitaba Colombia por asuntos religiosos. Nos
entretuvimos tanto conversando con él, que montamos al avión de
últimos, cuando los demás pasajeros estaban ya acomodados en sus
asientos.
Al llegar al aeropuerto de Ciudad Panamá lo recorrimos
en busca de Lars, quien debió estar allí en esos momentos, pero
no tuvimos suerte.
Llegamos a La Habana faltando quince minutos
para las siete de la noche, terminaba así una semana de intensas
emociones e inolvidables experiencias.
Una semana donde de
manera casi mística, confluyeron la amistad, el desinterés y el
amor a la radio.
Agradecimientos y
algo más...
Solo unos
días luego de mí llegada a Las Tunas, el 28 de noviembre, decidí
comenzar a escribir esta especie de diario de viaje, aunque la
idea venía
caminando desde nuestras primeras y estresantes
jornadas previas al viaje, cuando Juan Carlos constantemente me
repetía que sobre aquello debía escribir.
La demora no ha sido
por abulia ni desánimo, lo he escrito a retazos, cuando el
tiempo y las musas lo han permitido.
En estos últimos párrafos
quiero incluir además de los agradecimientos algo más que me
parece curioso: el origen del nombre de la estación. Ofrezco
disculpas porque quizás a muchos les parezca extensa y
excesivamente detallista esta narración; realmente he pecado de
minimalista.
Fue tal el volumen
y la calidad de las experiencias vividas durante esta semana
fuera de la patria que sin dudas, algún detalle debió escaparse
entre tantos agolpados en mi cabeza.
Ante todo,
quisiera agradecer a quienes desde el principio, de una manera
más o menos determinante, ayudaron al feliz desenlace de esta
historia. Sobre todo y a pesar de no agradarle los
reconocimientos, llegue el agradecimiento mayor a Jorge/HK1R,
quien hizo posible que nuestra presencia en HK1NA fuera más allá
de un proyecto soñado.
A Pepín/HK3TK, por estar y extender su
mano. Gracias además al Sr. Cónsul de Colombia en La Habana Dr.
Helmut Bellingrodt, sin cuya amable y decisiva colaboración no
se hubiera “desbrozado” a tiempo el camino.
Por cierto, el Sr.
Cónsul fue radioaficionado durante un tiempo y además, muy
recordado entre sus compatriotas y colegas costeños, pues fue en
Munich 1972, el primer medallista olímpico que tuvo su país.
Allí alcanzó medalla plateada en tiro, en Los Ángeles 1984
repitió esa misma actuación.
El agradecimiento también al Sr.
Roberto Rey/HK3CW, Presidente de la Liga Colombiana de
Radioaficionados por el apoyo brindado en su momento, a mi QSL
manager Erhard/DK1WI y a todos y cada uno de los grandes amigos
que conocimos en Jumanji, por su humildad, por el apoyo
incondicional, la hospitalidad y sobre todo, por la amistad más
sincera que estamos seguros, sobrevivirá a la distancia y el
tiempo. ¡Muchas gracias a todos!
¿Por qué Jumanji?
Fue algo
que siempre me pregunté y estoy seguro, es una pregunta que
muchos
se
han hecho.
Salim/HK1T fue el primero con quien conversé sobre el
tema, es una bonita historia la de Jumanji, valdría la pena
escribirla o documentarla en un audiovisual.
Según me contó Sal,
cuando aún no existía nada más que la finca y una rústica
construcción, alguna que otra vez operaban concursos de manera
individual desde aquel edificio.
Allí por supuesto, pululaban
los animales que tenían la finca como hogar y con los que
cohabitaban de la mejor manera posible, permitiéndoles incluso,
dormir entre sus pies durante las noches de insomnio frente al
radio.
En una de
las tantas ocasiones en que alguien le solicitó su anuencia a
Jorge para operar desde allí, esta persona le comentó su
propósito a Salim y este, ni corto ni perezoso le contestó –
¡Ah, tu para dónde vas es para Jumanji!- haciendo referencia a
la obra literaria de Chris Van Allsburg, luego llevada al cine y
protagonizada por Robin Williams, en la que una casa,
repentinamente se convierte en una muy bien poblada jungla, por
el efecto de un mágico juego.
Algún tiempo después, cuando se
construyó la estación, se decidió bautizarla con este nombre en
honor a la ocurrente respuesta de Salim.
Ahora que lo pienso, el
nombre no pudo ser otro, ¿la magia que se respira y se siente en
HK1NA no habrá sido heredada de su literario bautismo?